sábado, octubre 31, 2009

En los blogs de El Mercurio, siguiendo al benchmark.

En esto de tratar de hacernos de algunos iconos para seguirlos, emularlos  y/o  copiarlos me he fijado en individuos que no fueron para mí – en los tiempos del moldeamiento- una figura connotada. Lo que se me inculcó fue el despegue de esta sociedad entre los años 1973 y 1989. Cabe entonces señalar que: los personajes de mi fantástica superación y alzamiento social, estaban entre castrenses e individuos de las castas elevadas de este país.
Pasó el tiempo y con él la democracia se instaló y las administraciones se han sucedido. No obstante, el cuadro no cambió mucho desde mi perspectiva. Sin desconocer el portentoso trabajo social que se ha sellado en este último gobierno, alentado por su antecesor pero… Algo aún nos está faltando y, como en otra oportunidad escribí, aún veo que en el mañana de mi hijo él tendrá que luchar por lo que se reparta y no por lo que se podría distribuir.
Esto es lo que vi con demasiada claridad en el año 2004 y lo seguiré pregonando después que mis funciones físicas entren en defunciones. Al leer a un individuo que se planteó junto a otros para lograr arrastrar a toda una nación hacia un exitoso devenir; no obstante, coartado por la indolente ignorancia que se ufana y adjudica el derecho a mantenerse enquistada en el timón de la nación.
Ahí es entonces cuando a uno le entra la idea y la lógica, aceptando el movimiento y escuchando atento. Se declara parte de la facción política que sindica a Chile como primero y no como segundo o tercero. Haciendo caso omiso de los que, ni siquiera, reconocen a un benchmark humano reconocido y, por ello mismo, también odiado.

Reciban un cordial saludo

Atte.
HSQO
http://el-benchmark.blogspot.com

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